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El 14 de mayo de 1976 secuestraron a María Martha, la hija de Martha Ocampo de Vázquez. Era psicopedagoga, tenía 23 años y estaba embarazada de un mes. También se llevaron a César Lugones, su marido, que tenía 26 años y era veterinario. Se habían conocido haciendo una misión solidaria en Esquel. Hoy, esta fundadora de las Madres de Plaza de Mayo, declarará en el tercer juicio de la causa ESMA por crímenes de Lesa Humanidad.

María Martha militaba junto a otros compañeros en el Bajo Flores. Siete miembros de ese grupo fueron desaparecidos. Entre ellos estaba Mónica Mignone, hija de “Chela” quien también estuvo entre las fundadoras de las Madres de Plaza de Mayo. Su padre, Emilio Mignone, es fundador del Centro de Estudios Legales y Sociales. En abril de este año Carlos Vásquez Ocampo, hermano de María Marta, declaró en el juicio. “Mi hermana y Mónica Mignone –declaró en la audiencia- se conocieron en el Colegio de la Misericordia. En ese colegio estaba Mónica Quinteros, la monja que las contacta para trabajar en asistencia social. Tenían apenas 14 o 15 años y se la llevan a los 24”.

El 23 de mayo de 1976, 9 días después de la desaparición de los jóvenes, un grupo de 100 agentes se llevaron a los curas Francisco Jalics y Orlando Yorio mientras daban misa en el Bajo Flores. En su declaración, Carlos Vázquez Ocampo dijo “los curas pertenecían a la Compañía de Jesús, a cargo de Jorge Bergoglio”. y explicó que si bien el grupo de su hermana no trabajaba directamente con estos curas -sino en la parroquia Santa María del Pueblo- se conocían y tenían relación.

En 1996, en una entrevista para la BBC, el marino Adolfo Scilingo le dijo a Martha Ocampo de Vázquez que su hija estaba muerta. “Fue un enorme dolor cuando me dio a entender que había hecho ‘el vuelo’.” Declaró la mamá. Scilingo también dijo que María Martha había dado a luz a un varón en la maternidad clandestina de la ESMA.
La megacausa ESMA investiga la desaparición de 789 víctimas del terrorismo de Estado. Hoy por la mañana también está previsto que declaren Zunilda Esther Grosso y Julio César Genoud.