Tweet |
El panelista del programa Intrusos transgredió varios puntos de la ley 26.485 que protege contra la violencia de género. Lo hizo al hablar ante cámara sobre una actriz cordobesa que fue madre hace un mes. El bebé sería hijo de Ventura y de ahí el conflicto. “En mi caso, no quiso abortar”, dijo.
Luis Ventura hablaba a sus compañeros de piso en el programa Intrusos. Pero lo hacía frente a cámara, en esa falsedad del set televisivo que hace parecer que se reproduce el living de la casa y el “entre nos” intimista de la comidilla en privado.Hacía minutos que el tema era su propia vida íntima: habló de un bebé que sería hijo suyo y que nació luego de una relación que tuvo con la actriz cordobesa Fabiana Liuzzi. En eso estaba, cuando esos labios que se fruncen a diario cuando anuncia que sabe algo vergonzoso de otra persona, pronunció primero: “A todo esto, yo me opongo a que continúe el embarazo, porque si bien yo tengo un concepto de vida, yo me opongo porque el médico dice que iba a ser un embarazo de alto riesgo”. Los tres “yo” le pertenecen y la falta de nombre para llamar a la que indica como “una señora”, también.
La ley 26.485 de Protección Integral de las Mujeres entiende por violencia contra ellas “toda conducta, acción u omisión, que de manera directa o indirecta, tanto en el ámbito público como en el privado, basada en una relación desigual de poder, afecte su vida, libertad, dignidad, integridad física, psicológica, sexual, económica o patrimonial, como así también su seguridad personal”.
Pero Ventura no se detuvo ahí y pasó al “sucio secretito” donde intentó denigrar a Liuzzi acusándola de lo que actualmente y hasta que no se debata en el Congreso es un delito penal: “Ella ya tenía una experiencia anterior con un señor famoso y casado con el que había abortado un embarazo anterior. En mi caso, no quiso abortar. No quiso discontinuar”. La situación no tardó en darse vuelta porque una "justiciera" Silvia Süller contó en el programa Insensatos, de Córdoba, que hace años quedó embarazada de una relación con Ventura y él le dio el dinero para pagar al médico que interrumpió la gestación.
Dentro de la ley 26.485, el artículo 3 -inciso e- dice que las mujeres deben “decidir sobre la vida reproductiva, número de embarazos y cuándo tenerlos”. Ventura dijo en el canal América en el horario de la sobremesa hogareña que presionó a una mujer a interrumpir su embarazo, aun cuando la decisión de ella era continuar adelante con la gestación.
El programa Intrusos ya viene dando muestras de violencia de género, al punto de que el Observatorio de Medios – conformado por la AFSCA, el INADI y el Consejo Nacional de las Mujeres– acusó a Jorge Rial de “violencia simbólica y mediática”. Fue porque en su programa llamó a Marianela Mirra “zorra” y “puta” y le dijo a cámara “te voy a pasar con un camión por arriba”. Rial –según dijo– tuvo esta semana una reunión con el INADI por esas frases. Y agregó que va a “bajar unos decibeles porque uno como comunicador tiene que medir lo que dice. Pero yo soy una persona que hablo en caliente y a veces, enojado, digo cosas que no tengo que decir”.
Se considera dentro de la violencia psicológica la “que causa daño emocional y disminución de la autoestima” o que “busca degradar o controlar sus acciones, comportamientos, creencias y decisiones, mediante amenaza, acoso, hostigamiento, restricción, humillación, deshonra, descrédito”. Ventura, el hombre del “concepto de vida”, no solo violenta la tranquilidad de una mujer que transita el puerperio, con un hijo de menos de dos kilos internado, sino que intenta degradar moralmente la vida privada de la cordobesa, dando un paso de comedia más para ejemplificar la “violencia mediática”.
Tweet |