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El libro apareció en marzo de este año en el Juzgado de Garantías de Alfredo Meade. Tenía muchas páginas rotas. En una de ellas, ajado por los años, estaba el habeas corpus 11.843. Lo había presentado  el 20 de noviembre de 1978 por Antonio Peter en beneficio de su hija María Elena y su yerno Armando Fioritti. María Elena era empleada del juzgado penal N°2 de Morón, ubicado frente al despacho del fiscal de Cámara Nieva Woodgate. A metros de allí quedaba la Comisaría Primera de Morón, donde funcionó un centro clandestino. 

 

Varios organismos de derechos humanos brindarán hoy una conferencia de prensa para dar detalles  sobre el hallazgo de tres recursos de hábeas corpus originales de personas que permanecen desaparecidas y que nunca fueron  contestados por la justicia de la localidad bonaerense de Morón. Entre los convocantes está el premio Nobel de la paz Adolfo Pérez Esquivel. 

 

También se descubrió el hábeas corpus presentado en su momento por la desaparición de Gustavo Morales Cortiñas, hijo de  Nora Cortiñas, de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora. 

 

Los documentos habían sido reclamados históricamente por organismos de derechos humanos, pero la justicia de Morón negó que  quedaran registros.  La Liga Argentina por los Derechos del Hombre y  la Asociación de Trabajadores Judiciales de Morón iniciaron una investigación paralela que en marzo de este año logró dar con los  primeros documentos.

 

María Elena y su marido Armando fueron desaparecidos el 17 de noviembre de 1978. Nunca más se supo de ellos. Habían dejado a su hija Margarita de un año y medio en un jardín de infantes que luego fue retirada por sus tíos. 

“Las denuncias sobre la desaparición de María Elena cayeron en el juzgado donde ella trabajaba y Nieva Woodgate debió impulsar la investigación, pero no lo hizo”,le dijo a Infojus Noticias el abogado Walter Brizzio. 

 

En aquel momento el juez de turno de Morón era Carlos Temperley –hoy fallecido-, cuñado de Carlos Renom, magistrado de la Suprema Corte de Justicia de la Provincia de Buenos Aires de la dictadura. Temperley solo remitió el oficio de habeas corpus a la Policía Bonaerense. Su secretaria se llamaba María Lucía Cassaín. 

El 13 de junio de 1977, la Suprema Corte había emitido una resolución donde instruía a los tribunales y jueces “que se abstengan de efectuar pedidos de informes al Estado Mayor Conjunto, relacionados con personas detenidas o desaparecidas”. Esto fue por pedido de la Junta Militar de la dictadura. En 2006, la misma Corte descalificó dicha resolución. 

 

Nieva Woodgate fue cuestionado por su actuación en el caso Candela Sol Rodríguez. En 2010, el Premio Nóbel Pérez Esquivel junto a organismos de derechos humanos pidieron su juicio político por su accionar durante la dictadura. En aquellos años también fue juez penal en Lomas de Zamora y permitió el traslado del dirigente montonero Ángel Georgiadis al Regimiento 7 para ser interrogado. 

 

Georgiadis fue torturado y luego asesinato En Uno de los papeles tiene un sello cruzado que dice subversivo. Nieva Woodgate permitió ese traslado y habría conocido la mecánica: no eran simples interrogatorios. Georgiadis fue torturado allí, y finalmente se reportó su muerte. 

 

Nieva Woodgate se jacta de haber recibido cualquier cantidad de habeas corpus en Lomas de Zamora y en Morón, pero en realidad es por la gran cantidad secuestros y desapariciones que hubo frente a su accionar. Bajo relevamiento de la Suprema Corte, se supo que en Lomas hubo 1171 habeas corpus y en Morón 1710. 

 

Por iniciativa de Serpaj y otros organismos de derechos humanos, la causa penal por María Elena apuntó a Nieva Woodgate y al camarista Mario Modes. La causa la tuvo el juez Norberto Oyarbide y el fiscal Gerardo Pollicita, que impulsó la investigación, pero se declararon incompetentes y pasó al juzgado federal de Morón. Ahí la agarró el juez Juan Pablo Salas y el fiscal Sebastián Basso pidió los habas corpus originales a la Justicia de Morón. Desde el juzgado de Garantía a cargo de Ricardo Fraga dijeron que los habeas estaban destruidos. “El Departamento de Archivo Histórico de la Suprema Corte en La Plata dijeron que están guardados en una caja fuerte en Morón, que siempre estuvieron ahí”, dijo Brizzio.

 

Por la causa de María Elena fue citado el actual juez del Crimen de La Matanza, Alfredo Pedro Drocchi, que fue meritorio del juzgado de Morón en 1981. “Cassain- actual camarista oficial- fue a buscar a María Elena acompañada de José Echeverría, exdefensor oficial de Morón. Fueron a la Brigada de Investigaciones y allí les dijeron que se había pedido zona liberada y que los involucrados eran subversivos. Después Cassain recibió una amenaza y no se metió más en el tema”, contó a Infojus Noticias Drocchi. 

 

Mientras Brizzio buscaba el habeas corpus de María Elena, encontró el de Morales Cortiñas, que fue secuestrado en la estación Castelar del ferrocarril Sarmiento el 15 de abril de 1977. Carlos no fue visto en cautiverio en ningún centro clandestino de detención y tampoco sus restos fueron encontrados. 

 

El trámite de Cortiñas no era un habeas corpus, sino que el expediente decía “privación ilégitima de la libertad”. 

“Hace 36 años que no sé nada de mi hijo, quiero saber dónde está, dónde está su cuerpo”, dijo Nora Cortiñas a Infojus Noticias tras conocer el hallazgo del habeas corpus.