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“En nuestro Gobierno no habrá jueces macristas”, fue una de las frases del primer discurso del presidente Mauricio Macri que más resonó en el recinto de la Cámara de Diputados donde se realizó la Asamblea Legislativa, donde juró como primer mandatario. Además, expresó su “total apoyo a la Justicia independiente” como baluarte de la democracia y aseguró que el rol de la Justicia es “ayudar a las personas a resolver sus conflictos”. En este sentido, reforzó la idea con otro de los ejes de su discurso: la necesidad de gobernar con la mirada puesta en la modernización. “Habrá que dotar a la tarea de la Justicia de recursos actualizados para que sus procesos estén a la altura de la realidad que vivimos, a las nuevas exigencias de una Argentina que despega”, completó.

Al cierre de la Asamblea, el nuevo ministro de Justicia y Derechos Humanos de la Nación, Germán Garavano, fue uno de los primeros miembros del flamante gabinete en salir del recinto. Mientras recorría los pasillos del Congreso camino a la salida, dialogó con Infojus Noticias sobre los próximos desafíos que encara su cartera: “Son los que señaló el Presidente, ir recuperando la normalidad y tratar de avanzar fuertemente en su modernización y que la Justicia brinde un mejor servicio a la gente, que realmente necesita un sistema que esté atento a sus conflictos para tratar de resolverlos en tiempo oportuno”. El propio Macri, en su discurso, expresó que la importancia de avanzar en una mayor celeridad en las resoluciones de los conflictos que llegan a la Justicia. “La Justicia está para ayudar a las personas a resolver sus conflictos con la aplicación debida de la ley y tiene que hacerlo con celeridad, justicia tardía no es justicia”, dijo.

Respecto a la modernización, Garavano remarcó que ya se está trabajando para poner en práctica lo antes posible un plan de y trabajo que no solo está enfocado en la Corte como vehículo hacia la Justicia Nacional, sino que también se trabajará con las justicias provinciales. “Desde el Ministerio uno de los principales programas será trabajar con todas las Cortes provinciales, con toda la Justicia Provincial que es la que le brinda el servicio al 90 por ciento de los argentinos”, dijo y completó: “La idea es apoyar las iniciativas de mejora que están llevando adelante los poderes judiciales de todo el país”.

En materia de Justicia, el discurso presidencial se centró en la idea de iniciar un proceso en el que el Ejecutivo acompañará para que la Justicia “se limpie de vicios políticos”. “No existe Justicia ni democracia sin Justicia independiente”, afirmó el Presidente y la respuesta de los legisladores fueron aplausos. Cuando retomó sentenció: “No puede haber jueces militantes de ningún partido, a quien quiera serlo le decimos claramente, no son bienvenidos si quieren pasar a ser instrumentos nuestros”.

Los equipos sobre las personas

Poco más de media hora duró el primer mensaje de Mauricio Macri ante la Asamblea Legislativa. Los mismos tres ejes que fueron base en la campaña presidencial fueron el nervio del mensaje: pobreza  cero, derrotar al narcotráfico y unir a los argentinos. Los tres ejes teñidos por un mensaje destinado a la oposición. “Queremos el aporte de todos”, expresó el Presidente que además envió un saludo a los candidatos de las otras fuerzas políticas que compitieron por la Presidencia. Tanto Sergio Massa como Margarita Stolbizer estuvieron presentes en sus bancas, uno como diputado nacional del Frente Renovador; la otra representando a Progresistas. Daniel Scioli también estuvo, él en calidad de invitado, sentado junto a la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal a quien le pasó el mando durante la mañana temprano.

El cierre del discurso fue acompañado por aplausos y la frase que signó la campaña del PRO: “Sí se puede”. El cantó bajó de los balcones del Congreso y se extendió en la calle, entre la gente que se acercó para acompañar al nuevo Presidente. Antes también se había escuchado con el arribo del auto blanco que dejó a Macri y a su mujer Juliana Awada en la explanada del Congreso.

Mientras, en el recinto, el presidente provisional del Senado, Federico Pinedo, junto al presidente de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó, comandaba la Asamblea que se prestaba a elegir a los miembros de las Comisiones Interior y Exterior que recibirían al nuevo Presidente para acompañarlo a través del Salón de los Pasos Perdidos hasta el recinto. Los senadores Juan Carlos Romero, Dalmacio Mera, Pamela Verasay, Silvia Elías de Pérez, Inés Blas y Jaime Linares; sumados a los diputados Mario Negri, Laura Alonso, José Ignacio de Mendiguren, Alicia Tirada, Alicia Ciciliani y Héctor Baldasi fueron los elegidos por la presidencia de la Asamblea para cumplir ese rol.

Baldasi, ex árbitro de fútbol y referente del PRO de Córdoba, en diálogo con Infojus Noticias resaltó el mensaje de unidad del Presidente y la idea de apostar al diálogo y al consenso. “Como dijo el Presidente, no somos infalibles, somos personas que nos podemos equivocar, pero queremos un horizonte diferente”, dijo y ponderó la idea del diálogo como eje principal de cara a un Congreso de composición heterogénea.

La primera en jurar fue la vicepresidenta Gabriela Michetti quien apenas terminó de hacerlo tomó posesión de su rol como Presidenta del Senado e invitó a Mauricio Macri a entrar para hacer su juramento y después sí, dirigir su primer mensaje como Presidente. Los diputados y senadores aplaudieron de pie, mientras los escaños de los legisladores del Frente para la Victoria permanecían vacíos.

Hernán Lombardi, elegido por Macri para estar al frente del sistema de medios públicos, fue otro de los miembros del Gabinete que al terminar la Asamblea habló con la prensa. Así, explicó que existen “enormes desafíos en materia de comunicación, que haya pluralidad respeto y tolerancia y calidad desde los medios públicos. Que las familias se puedan sentar frente a ellos y saber que van a estar todas las voces en un tono de respeto”.