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El noveno juicio en Salta por delitos de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura comenzó hoy, con la lectura de la requisitoria fiscal de tres de los seis expedientes que se ventilarán en este proceso, con al menos 24 víctimas y con acusados ex policías, ex gendarmes y ex militares, entre ellos, el ex jefe del Ejército Héctor Ríos Ereñú, ya condenado a perpetua en otra casusa. "En la megacausa fueron condenados algunos de los que hoy están acusados pero yo sigo viendo cómo nosotros estábamos en cárceles comunes y ellos están con prisión domiciliaria. Dicen que es por la edad, pero no me parece justo", dijo a Télam Pía Asunción Vilte, que era pareja del secuestrado y desaparecido Raúl Benjamín Osores.

El de Osores es el expediente 4375/15, en el que están acusados Miguel Gentil, un militar que estaba a cargo de la Policía de Salta en la época de los hechos, y Diego Varas, el entonces jefe del Escuadrón 20 "Orán", de Gendarmería, en el norte salteño. "Ellos gozan de privilegios después de lo que han hecho, que no tiene nombre", afirmó Vilte, quien detalló que Osores se entregó a la Policía porque le habían dicho que si lo hacía la liberaban a ella, que estaba detenida.

"A mí me detuvieron el 24 de marzo de 1976 y a él nunca más lo vi. Me detienen en Embarcación, de ahí me trasladan a Orán, al Escuadrón 20, después a Salta, el 7 de abril. Según testimonios, dicen que él se presenta el 10 de abril, en Embarcación, y el 12 lo llevan a Orán y luego a la Central de Policía en Salta, donde lo desaparecen. Le mintieron", explicó.

Vilte, que estuvo tres años y medio detenida y que terminó en la cárcel de Devoto, en Buenos Aires, manifestó: "Lo sigo esperando al flaco. Lo soñé en varias oportunidades en el dique Cabra Corral, y se lo veía muy nervioso. Yo pienso que su cuerpo está ahí". Osores era secretario general del Sindicato de los Trabajadores Rurales en la localidad de Embarcación, integraba la Acción Católica y militaba en la Juventud Peronista.

El Tribunal Oral Federal de Salta, integrado por Marcelo Juárez Almaraz, Federico Díaz y Gabriel Casas, con Carlos Jiménez Montilla como cuarto juez, está a cargo del proceso, que se extenderá por varios meses, teniendo en cuenta la cantidad de casos a analizar y de testigos convocados.

24 víctimas

El juicio comenzó pasadas las 15.30 y, tras la lectura de la requisitoria fiscal de los expedientes 3899/13, 4362/15 y 4376/15, los imputados en esas causas, los ex militares Joaquín Guil, Miguel Gentil y Víctor Mendíaz; y el ex gendarme Varas, desistieron del derecho de hacer uso de la palabra. Tras este trámite, la audiencia pasó a un cuarto intermedio hasta el 19 de octubre, cuando se intentará dar apertura a las otras tres causas que fueron acumuladas en este juicio y que hoy no pudieron abrirse.

Además de Ríos Ereñú, Gentil, Mendíaz, Guil y Varas, los acusados son el inspector mayor retirado de la Policía, Arturo Madrigal, que estaba a cargo de la Comisaría de la localidad norteña de Embarcación; Y el ex gendarme Mario Patané. Se analizan los delitos de privación ilegítima de la libertad y homicidio, cometidos en perjuicio de 24 personas, principalmente militantes políticos, docentes y estudiantes del norte de la provincia de Salta.

Entre estas víctimas se destacan Mario Luna, Sergio Copa, Santos Garnica, David León Paz, Silvia Saez de Vuistaz, Reynaldo Isola, Juan López, Luis Risso Patrón, Alfredo Bellandi, Carlos Mosca Alsina, Felipe Burgos, Ernesto Mamaní, Oscar Bianchini, Néstor Díaz, y las hermanas Francisca y Carmen Torres.

Otras víctimas son Osores, Juan de Dios Ortíz, Gregorio Tufiño Ruiz, Roberto Zelarayán, Angel Antonio Juárez, Benita Giménez, Raúl Araujo y Nicolasa Montilla. De las 24 víctimas, 19 han sido asesinadas o se encuentran desaparecidas.

Vislumbrar la verdad

Entre los acusados también se encontraba el jefe de la guarnición militar de Salta durante la dictadura, Carlos Mulhall, quien falleció en noviembre del año pasado, a los 84 años, cuando cumplía prisión domiciliaria luego de ser condenado por el secuestro y el homicidio del ex gobernador Miguel Ragone y por la denominada Masacre de Palomitas, entre otras causas.

"Realmente tenemos la esperanza de que en algún momento se pueda vislumbrar la verdad de toda esta historia y que se haga justicia. Pero también, en estos momentos revivimos todo y aparece el sufrimiento y el dolor. Es como si hubiera ocurrido ayer y no hace 40 años", dijo Gloria a Télam, la hermana de Sergio Copa. Su padre, Justo Copa, visiblemente emocionado y con lágrimas en los ojos, contó cómo lo golpearon cuando fueron a buscar a su hijo para detenerlo.

La querella de la secretaría de Derechos Humanos de la Nación está representada por Martín Ávila y Gastón Casabella, mientras que Tania Kiríaco representa a la Universidad Nacional de Salta y David Leiva a Encuentro por la Memoria, Verdad y Justicia. Los representantes del Ministerio Público son Francisco Snopek y el ad hoc Juan Manuel Sivila.

Guil siguió la audiencia desde la sala de los tribunales federales salteños, mientras que Gentil lo hizo a través de videoconferencia, desde Buenos Aires; Mendíaz desde Rosario de Santa Fe y Varas desde la sede del Tribunal Oral de Córdoba.

Télam/RA